humuusa, eso mismo es lo que ha hecho Domingo Serrano con Retorno a Brookmere, ha adaptado el contenido del libro-juego a módulo sencillo para Aventuras en la Marca del Este. Que se puede hacer algo así es, por tanto, evidente. A lo que me refiero es a que si yo estoy solo y me adapto un libro-juego a módulo pasa una de dos cosas: bien ya conocía el libro-juego y realizo la adaptación, bien no lo conocía y me lo leo para adaptarlo. Con cualquiera de las dos opciones tengo que conocerme el libro-juego, elaborar su mapa o mapas (o tomar alguno existente por fans del propio libro-juego como en Retorno a Brookmere) y puntuar las características de las criaturas de los diferentes lugares con que se encontrará el personaje o personajes además de los acertijos, puzzles o lo que sea que deba haber.
Si hago todo eso resulta que de partida en solitario tiene poco. Ya sé por donde tirar, qué me voy a encontrar, las criaturas que debería evitar, el orden en el que me saldrán y el equipo que me interesa llevar o como dosificarlo en base a esa información. No es emocionante saber de antemano todo lo que va a pasar, se convierte en un mero mata-mata sin mucha chicha.
Yo he descargado para jugar precisamente con Aventuras en la Marca del Este el módulo Retorno a Brookmere, pero conmigo como DM y sabiendo que ninguno de mis jugadores ha leído el libro-juego de chaval. Por si acaso le he cambiado el nombre al módulo, he alterado la ubicación de algunas criaturas y eventos, lo habitual cuando se trata de material en la red a disposición de cualquiera. Yo no podría jugarla, ni modificada ni sin modificar, me sabría todo lo que va a suceder.
Lo suyo sería diferenciar tipo de fuentes o colores para lo que debe saber el DM y lo que conoce el jugador. Antaño en los módulos solía venir muy diferenciado esto y sin leer nada, solo mirando de lejos la página, uno sabía lo que era del DM y lo que se leía a los jugadores. Hoy eso no está tan bien marcado y entiendo que a menos que se encuentre un módulo donde sea al 100% imposible confundirse con la información y leer lo que no se deba, es imposible disfrutar jugando en solitario un módulo.
Sin embargo, con juegos tácticos como Castle Ravenloft o Wrath of Ashardalon, sí que puedo jugar solitarios porque el mapa es distinto cada vez al ir saliéndome las losetas en orden diferente. Las criaturas de cada loseta con monstruo se toman del mazo de cartas, de modo que no siempre aparecen en la misma loseta las mismas criaturas. La pega, como decía, es que ese tipo de juegos de tablero-rol son básicamente mata-mata porque no hay mucho más que hacer. Eso no significa ni que esté criticándolos (tengo ambos y los juego habitualmente lo mismo que otros por el estilo, aunque como Runebound ninguno), ni que me parezcan malos juegos o que, por extensión, todo lo táctico sea negativo o el propio D&D 4E sea peor que los anteriores. No puedo decir semejante cosa primero porque no creo que sea así y segundo porque no tengo la experiencia necesaria en la 4E como para opinar en profundidad.
De todos modos me sumo a lo dicho por el compañero Aoren, lo suyo sería que si tienes ganas de jugar rol pero en estos momentos no tienes grupo de juego, siempre puedes recurrir a jugar por foro o a través del Fantasy Grounds. Tienes en este foro una sección didicada a dicho programa con unso magníficos vídeos introductorios.