JMonpellieur
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Neverwinter en la Actualidad

Después de tanto abuso y abandono, gran parte de la arquitectura de la ciudad está dañada o se encuentra en ruinas. Los recientes esfuerzos de reparación han dado a Neverwinter un aspecto de mosaico; los suburbios se yuxtaponen con las nuevas construcciones, todo descansa sobre los restos destrozados de edificios antiguos. Algunos distritos están más intactos que otros, y los antiguos ciudadanos han vuelto a sus mismas áreas, gracias a los esfuerzos del Lord Protector de la ciudad: Dagult Neverember, Lord Público de Aguasprofundas.
Historia Reciente
Los residentes de Neverwinter ven con cariñoso patriotismo la vida y reinado de Nasher Alagondar, un antiguo aventurero que ascendió a gobernar la ciudad hace mas de 150 años. Una extraordinaria historia dice que él rechazó el título de rey de mucho, si no todo, su reino; Hoy en día, los nativos de Neverwinter aun debaten si el era realmente un rey o un simple pastor de su gente. De todos modos, Alagondar guió a la ciudad con una mano justa por su fe en Tyr, en esa época el dios de la justicia, y sus elegidos guardaespaldas y bendecidos compañeros, formaron los Nueve de Neverwinter.
Muchos detalles de la vida Alagondar han caído en el olvido a raíz de la Plaga de Conjuros y el cataclismo, pero se sabe que dio lugar a una línea de reyes que gobernaron mucho y bien. Una aparentemente ininterrumpida linea de sucesión que se traza desde Alagondar hasta el último rey y reina de Neverwinter, que desaparecieron veintisiete años atrás, en el cataclismo que se cobró la ciudad.
Esta catástrofe empobrecido drásticamente la población de Neverwinter. Unas pocas docenas quedaron, negándose a abandonar sus hogares ancestrales. Desafortunadamente para ellos, la mayor parte del cuadrante sureste de la ciudad se derrumbó en un pozo sin fondo, conocido como el Abismo, que continuamente genera horrores marcados por la plaga. Supervivientes de aptitud organizada construyeron un muro para contener a los monstruos, y con el tiempo sus patrullas se convirtieron en un deber sagrado.
Durante la última década, Dagult Neverember ha hecho progresos en la restauración de la ciudad devastada. Viendo una oportunidad para añadirla a su imperio mercantil, Lord Neverember empleó un ejército de artesanos y carpinteros para reconstruirla, y contrató a mercenarios de Mintarn para mantener a raya a los monstruos y mantener el orden. Hace cinco años, Neverember establecido el Enclave del Protector desde su base en el Palacio de Justicia, y declaró que sección de la ciudad era segura para su ocupación. Desde entonces, ha trabajado para dominar las calles salvajes, reconstruir las ruinas, y convencer a los refugiados de regresar a sus hogares.
Las personas que no abandonaron la ciudad después del cataclismo tardan en aceptar el control del Lord Protector de lo que algunos llaman "Nuevo Neverwinter". En particular, un grupo rebelde llamado los Hijos de Alagondar unidos para derrocar al hombre al que llaman el Pretendiente a través de una campaña de agitación pública, sabotaje y robo. Detrás de los rebeldes, la mano firme de los Arpistas del norte ofreció orientación, tratando de evitar el alzamiento de otro aspirante a tirano en la frágil región. Sin embargo, a raíz del reciente asesinato de su líder, los Hijos han atacado por su cuenta, los Arpistas ahora están desesperado por recuperar la ciudad para el bien y la libertad.
Pero el estado policial de Lord Neverember se extiende hasta el momento. Más allá del Enclave del Protector tanto monstruos como nativos deambulan por las calles, asentándose en barrios enteros de la ciudad. La parte noreste se rige por los orcos del Reino de Muchas-Flechas. En el noroeste, el distrito de Lago Negro se agita con tensión desde la oposición tanto secreta como abierta contra Lord Neverember. La zona sureste de la ciudad está en ruinas que rodeando el enorme Abismo.
Las calles pobremente vigiladas y la débil situación política de Neverwinter la convierten en un posible objetivo para todo tipo de villanos. Nunca han sido los héroes más necesarios en el Salvaje Norte.
Muchos detalles de la vida Alagondar han caído en el olvido a raíz de la Plaga de Conjuros y el cataclismo, pero se sabe que dio lugar a una línea de reyes que gobernaron mucho y bien. Una aparentemente ininterrumpida linea de sucesión que se traza desde Alagondar hasta el último rey y reina de Neverwinter, que desaparecieron veintisiete años atrás, en el cataclismo que se cobró la ciudad.
Esta catástrofe empobrecido drásticamente la población de Neverwinter. Unas pocas docenas quedaron, negándose a abandonar sus hogares ancestrales. Desafortunadamente para ellos, la mayor parte del cuadrante sureste de la ciudad se derrumbó en un pozo sin fondo, conocido como el Abismo, que continuamente genera horrores marcados por la plaga. Supervivientes de aptitud organizada construyeron un muro para contener a los monstruos, y con el tiempo sus patrullas se convirtieron en un deber sagrado.
Durante la última década, Dagult Neverember ha hecho progresos en la restauración de la ciudad devastada. Viendo una oportunidad para añadirla a su imperio mercantil, Lord Neverember empleó un ejército de artesanos y carpinteros para reconstruirla, y contrató a mercenarios de Mintarn para mantener a raya a los monstruos y mantener el orden. Hace cinco años, Neverember establecido el Enclave del Protector desde su base en el Palacio de Justicia, y declaró que sección de la ciudad era segura para su ocupación. Desde entonces, ha trabajado para dominar las calles salvajes, reconstruir las ruinas, y convencer a los refugiados de regresar a sus hogares.
Las personas que no abandonaron la ciudad después del cataclismo tardan en aceptar el control del Lord Protector de lo que algunos llaman "Nuevo Neverwinter". En particular, un grupo rebelde llamado los Hijos de Alagondar unidos para derrocar al hombre al que llaman el Pretendiente a través de una campaña de agitación pública, sabotaje y robo. Detrás de los rebeldes, la mano firme de los Arpistas del norte ofreció orientación, tratando de evitar el alzamiento de otro aspirante a tirano en la frágil región. Sin embargo, a raíz del reciente asesinato de su líder, los Hijos han atacado por su cuenta, los Arpistas ahora están desesperado por recuperar la ciudad para el bien y la libertad.
Pero el estado policial de Lord Neverember se extiende hasta el momento. Más allá del Enclave del Protector tanto monstruos como nativos deambulan por las calles, asentándose en barrios enteros de la ciudad. La parte noreste se rige por los orcos del Reino de Muchas-Flechas. En el noroeste, el distrito de Lago Negro se agita con tensión desde la oposición tanto secreta como abierta contra Lord Neverember. La zona sureste de la ciudad está en ruinas que rodeando el enorme Abismo.
Las calles pobremente vigiladas y la débil situación política de Neverwinter la convierten en un posible objetivo para todo tipo de villanos. Nunca han sido los héroes más necesarios en el Salvaje Norte.

El Enclave del Protector
El Lord Protector de Neverwinter gobierna la ciudad desde el Palacio de Justicia, el antiguo templo de Tyr. Más alejado del origen del gran terremoto que sacudió el monte Hotenow hace casi tres décadas, esta área de Neverwinter sufrió la menor destrucción. Esta buena fortuna también hizo al distrito el objetivo principal para Lord Neverember. Movió una fuerza abrumadora de mercenarios en el distrito, aseguró su base, y, desde entonces, ha pasado la mitad de su tiempo aquí y la mitad en Aguasrofundas.
El Enclave del protector se encuentra casi intacto, y muchos antiguos residentes de la ciudad han vuelto a vivir aquí junto a los nuevos inmigrantes. A pesar de que este distrito es la parte más estable de Neverwinter, se irrita bajo la mano firme de Sabine, el general de las fuerzas de Lord Neverember. Los espías observan cada barrio y lugar de encuentro notable, y las fuerzas Mintarm marchan por las calles. Cuando los aldeanos se quejan, Neverember echa la culpa a uno u otro de sus subordinados y, posteriormente, es aclamado como un héroe por escarmentar al supuesto canalla. Asegura a los ciudadanos que está haciendo todo lo posible en ésta mala situación.
El Enclave cuenta con el mercado mejor surtido en la ciudad, gracias al comercio de Aguasprofundas y otras ciudades a lo largo de la Costa de la Espada. La ciudad tasa todas las transacciones hechas aquí a un ritmo pronunciado que los indígenas han llegado a aceptar a regañadientes. Los impuestos pagan los soldados Mintarn que vigilan cada recién llegado al barrio con un ojo agudo. En el Enclave, los personajes sospechosos o desconocidos no permanecen ocultos por mucho tiempo.
El Enclave del protector se encuentra casi intacto, y muchos antiguos residentes de la ciudad han vuelto a vivir aquí junto a los nuevos inmigrantes. A pesar de que este distrito es la parte más estable de Neverwinter, se irrita bajo la mano firme de Sabine, el general de las fuerzas de Lord Neverember. Los espías observan cada barrio y lugar de encuentro notable, y las fuerzas Mintarm marchan por las calles. Cuando los aldeanos se quejan, Neverember echa la culpa a uno u otro de sus subordinados y, posteriormente, es aclamado como un héroe por escarmentar al supuesto canalla. Asegura a los ciudadanos que está haciendo todo lo posible en ésta mala situación.
El Enclave cuenta con el mercado mejor surtido en la ciudad, gracias al comercio de Aguasprofundas y otras ciudades a lo largo de la Costa de la Espada. La ciudad tasa todas las transacciones hechas aquí a un ritmo pronunciado que los indígenas han llegado a aceptar a regañadientes. Los impuestos pagan los soldados Mintarn que vigilan cada recién llegado al barrio con un ojo agudo. En el Enclave, los personajes sospechosos o desconocidos no permanecen ocultos por mucho tiempo.
El Salón de Justicia
Los altos muros y la mampostería imponente del antiguo templo de Tyr se marcan como un bastión eterno del deber y de honor. El gran templo se encuentra sobre un acantilado junto al mar, desafiando todas las amenazas procedentes del Mar de las Espadas o de interior de Faerun.
Cuando el Señor Neverember puso su mirada en la ciudad, escogió el Salón de Justicia como su base de operaciones por su valor práctico (el cataclismo lo dejó casi intacto) y su significado emocional para la gente de Neverwinter. La ciudad había servido durante mucho tiempo a Tyr, el dios de la justicia, y aun después de que la deidad cayera casi un centenar de años atrás, los residentes rechazaron convertir el templo para adorar a otro dios.
Al restaurar el templo a su estado anterior, Neverember trata de ganarse a los tradicionalistas de la ciudad y establecerse como defensor de las leyes de la justicia. Financia a sacerdotes de Torm cuyos ritos emulan la tradición Tyriana, con la esperanza de atraer nuevos devotos al templo (y a la causa del Lord Protector).
El templo en sí es una estructura radiante y hermosa, por dentro lo suficientemente grande como para que gigantes caminaran cómodamente o los dragones descansaran en el gran salón, bajo el alto techo de la cúpula. Los adornos del edificio reflejan una época pasada, una dedicada a la justicia y la templanza en todas las cosas.
La Residencia del Lord
Desde su oficina, que se ve cada vez más como una sala del trono, Lord Neverember resuelve edictos, coordina las actividades de sus seguidores, y (cuando tiene tiempo) mantiene audiencias con los empobrecidos ciudadanos de la ciudad. Sin embargo, no tiene facilidad para administrar justicia, y piensa que sería políticamente insensato presentarse como magistrado de la ciudad. Por lo tanto, ha delegado esa función en Somán Galt, a quien ha nombrado alcalde de Neverwinter. El enano escucha cansado al solicitante y después suplicante, ofreciendo la mediación de mala gana, y cargando la culpa de las políticas de Neverember. Mientras tanto, el señor realza su imagen de campeón carismático que no se rebajaría a la pequeña política.
Neverember ha decorado sus habitaciones privadas, a la manera de Aguasprofundas, aunque tiene cuidado de no mostrar ningún sello o escudo de armas pertenecientes a su ciudad natal. Ha tomado los departamentos antiguos del sumo sacerdote para sí mismo, y la mayoría de sus guarniciones de mercenarios habitan en otras cámaras del templo, con una multitud de servidores para de ellos. Algunos sacerdotes de Torm habitan en el complejo, y aunque son fieles a su dios y sus preceptos, sirven sobre todo para aparentar.
Cuando el Señor Neverember puso su mirada en la ciudad, escogió el Salón de Justicia como su base de operaciones por su valor práctico (el cataclismo lo dejó casi intacto) y su significado emocional para la gente de Neverwinter. La ciudad había servido durante mucho tiempo a Tyr, el dios de la justicia, y aun después de que la deidad cayera casi un centenar de años atrás, los residentes rechazaron convertir el templo para adorar a otro dios.
Al restaurar el templo a su estado anterior, Neverember trata de ganarse a los tradicionalistas de la ciudad y establecerse como defensor de las leyes de la justicia. Financia a sacerdotes de Torm cuyos ritos emulan la tradición Tyriana, con la esperanza de atraer nuevos devotos al templo (y a la causa del Lord Protector).
El templo en sí es una estructura radiante y hermosa, por dentro lo suficientemente grande como para que gigantes caminaran cómodamente o los dragones descansaran en el gran salón, bajo el alto techo de la cúpula. Los adornos del edificio reflejan una época pasada, una dedicada a la justicia y la templanza en todas las cosas.
La Residencia del Lord
Desde su oficina, que se ve cada vez más como una sala del trono, Lord Neverember resuelve edictos, coordina las actividades de sus seguidores, y (cuando tiene tiempo) mantiene audiencias con los empobrecidos ciudadanos de la ciudad. Sin embargo, no tiene facilidad para administrar justicia, y piensa que sería políticamente insensato presentarse como magistrado de la ciudad. Por lo tanto, ha delegado esa función en Somán Galt, a quien ha nombrado alcalde de Neverwinter. El enano escucha cansado al solicitante y después suplicante, ofreciendo la mediación de mala gana, y cargando la culpa de las políticas de Neverember. Mientras tanto, el señor realza su imagen de campeón carismático que no se rebajaría a la pequeña política.
Neverember ha decorado sus habitaciones privadas, a la manera de Aguasprofundas, aunque tiene cuidado de no mostrar ningún sello o escudo de armas pertenecientes a su ciudad natal. Ha tomado los departamentos antiguos del sumo sacerdote para sí mismo, y la mayoría de sus guarniciones de mercenarios habitan en otras cámaras del templo, con una multitud de servidores para de ellos. Algunos sacerdotes de Torm habitan en el complejo, y aunque son fieles a su dios y sus preceptos, sirven sobre todo para aparentar.
La Máscara de Moonstone
Un viaje que induce al vértigo a lo largo de un sendero por un acantilado lleva a los aventureros a un nuevo componente de la silueta de Neverwinter. La mota de tierra ahora conocida como Moonstone flota al lado de la orilla occidental del Enclave del Protector, sobre los muelles que tiene debajo. Cuelga a unos treinta metros por encima de las olas del Mar de las Espadas, fijada en el lugar por gruesas cadenas atadas a pesadas anclas. Un puente que une la mota de tierra y los muelles permite a los visitantes entrar y salir de la Moonstone. El hotel que da nombre a la mota, la Máscara de Moonstone, ofrece a sus huéspedes alojamiento de lujo, compañía agradable, y una vista de infarto.
Historia
La historia de la Máscara de Moonstone es una lección práctica de como convertir una mala situación en ventaja. Cuando la Plaga de Conjuros golpeó Neverwinter hace casi un centenar de años, la tierra alrededor de la posada de lujo se liberó de su entorno y está flotó hacia el cielo. Los invitados rápidos de pensamiento aseguraron con correas, y docenas de gruesas cuerdas se enlazo desde la posada a edificios cercanos, del mismo modo que un buque se inmoviliza en una bahía. Así, asegurada, la Máscara de Moonstone reabrió a los negocios en un año, con una vista panorámica de la ciudad y los alrededores. La gente venía de muy lejos para quedarse en la posada flotante maravillosa, y se convirtió en un añadido de la post-Plaga de Conjuros a la economía de la ciudad.
La Moonstone cayó nuevamente en desgracia después del cataclismo que se cobró gran parte de la ciudad. El terremoto no afectó la mota de tierra, pero rompió las cuerdas que lo sujetaban, y fue a la deriva sobre el océano durante meses. Cuando los ocupantes finalmente lograron dirigir de regreso la posada, se encontraron un verdadero desastre: la ciudad estaba vacía de gente. El posadero encargó una serie de pesadas cadenas lo suficientemente grandes como para contener a un gigante y volvió a caer en las viejas maneras de atraer clientes, convirtiendo a la posada en una sala de fiestas que ofrecía música y baile desenfrenado, bebida en exceso, y más entretenimientos privados. Sin embargo, era demasiado poco y demasiado tarde. Carente de negocio, la Máscara de Moonstone cerró sus puertas, aparentemente para siempre.
La Moonstone en la Actualidad
En gran parte, la Máscara de Moonstone debe su renacimiento y su existencia en la actualidad a Lord Neverember y Nuevo Neverwinter. Se devuelve el favor albergando numerosos ejecutores Mintarn de la ciudad, incluyendo su comandante, el general Sabine. Como tales, los mercenarios dominan la atmósfera una vez genial de la posada hedonista y los mercenarios de Neverember son conocidos por discutir o pelear con otros clientes.
La semielfa Liset Cheldar hace funcionar la Máscara de Moonstone con un guiño y una sonrisa. Ella realmente gusta a la mayoría de la gente que conoce, y coquetea con cualquiera que parezca receptivo. Como nativa recientemente de regreso a la ciudad que heredó la posada, Liset estaba encantada de encontrar el lugar todavía en una pieza (y flotante). La legitimidad de su reclamación de la Moonstone no era clara, pero, manejando su encanto natural, presionó con éxito a Neverember para conseguir los fondos para reabrir la posada, y mantiene una sonrisa brillante gracias a su patrocinio.
Historia
La historia de la Máscara de Moonstone es una lección práctica de como convertir una mala situación en ventaja. Cuando la Plaga de Conjuros golpeó Neverwinter hace casi un centenar de años, la tierra alrededor de la posada de lujo se liberó de su entorno y está flotó hacia el cielo. Los invitados rápidos de pensamiento aseguraron con correas, y docenas de gruesas cuerdas se enlazo desde la posada a edificios cercanos, del mismo modo que un buque se inmoviliza en una bahía. Así, asegurada, la Máscara de Moonstone reabrió a los negocios en un año, con una vista panorámica de la ciudad y los alrededores. La gente venía de muy lejos para quedarse en la posada flotante maravillosa, y se convirtió en un añadido de la post-Plaga de Conjuros a la economía de la ciudad.
La Moonstone cayó nuevamente en desgracia después del cataclismo que se cobró gran parte de la ciudad. El terremoto no afectó la mota de tierra, pero rompió las cuerdas que lo sujetaban, y fue a la deriva sobre el océano durante meses. Cuando los ocupantes finalmente lograron dirigir de regreso la posada, se encontraron un verdadero desastre: la ciudad estaba vacía de gente. El posadero encargó una serie de pesadas cadenas lo suficientemente grandes como para contener a un gigante y volvió a caer en las viejas maneras de atraer clientes, convirtiendo a la posada en una sala de fiestas que ofrecía música y baile desenfrenado, bebida en exceso, y más entretenimientos privados. Sin embargo, era demasiado poco y demasiado tarde. Carente de negocio, la Máscara de Moonstone cerró sus puertas, aparentemente para siempre.
La Moonstone en la Actualidad
En gran parte, la Máscara de Moonstone debe su renacimiento y su existencia en la actualidad a Lord Neverember y Nuevo Neverwinter. Se devuelve el favor albergando numerosos ejecutores Mintarn de la ciudad, incluyendo su comandante, el general Sabine. Como tales, los mercenarios dominan la atmósfera una vez genial de la posada hedonista y los mercenarios de Neverember son conocidos por discutir o pelear con otros clientes.
La semielfa Liset Cheldar hace funcionar la Máscara de Moonstone con un guiño y una sonrisa. Ella realmente gusta a la mayoría de la gente que conoce, y coquetea con cualquiera que parezca receptivo. Como nativa recientemente de regreso a la ciudad que heredó la posada, Liset estaba encantada de encontrar el lugar todavía en una pieza (y flotante). La legitimidad de su reclamación de la Moonstone no era clara, pero, manejando su encanto natural, presionó con éxito a Neverember para conseguir los fondos para reabrir la posada, y mantiene una sonrisa brillante gracias a su patrocinio.
El Muro
Un gran revoltijo de madera y piedra recolectada, el Muro separa el civilizado Neverwinter del Abismo y los horrores que genera. EL muro permite a los guardias atacar desde unas posiciones relativamente seguras, y proporciona puestos de avanzada para los espectadores. El enorme caos de residuos ensangrentados en la base de la zona oriental, sin mencionar los ocasionales cadáveres putrefactos de mas de una muerte reciente dicen mucho del éxito de El Muro como una fortificación defensiva.
El muro fue construido poco después del cataclismo, cuando los residentes de la ciudad que quedaban se dieron cuenta de que necesitaban una defensa contra los monstruos retorcidos que desbordaban el Abismo.
En sus primeros días, el Muro mantuvo a raya a los monstruos derivándolos hacia partes de la ciudad que ya habían sido destruidas. Cuando Neverember llegó, se convirtió en una prioridad reforzar lo que él veía como una fortificación defensiva eficaz con sus propios ingenieros y soldados. En un principio, el muro bloqueaba a sólo unas calles donde los ataques eran comunes, pero desde que empezó la reconstrucción, se ha expandido hasta extenderse desde el cementerio Neverdeath hasta la antigua Casa del Saber.
En combinación con el río Neverwinter, el Muro sigue brindando contención efectiva, aunque la gente ha visto monstruosidades cambiados por la plaga en la demarcación del norte y, más recientemente, cerca de los agujeros de drenaje de la ciudad. La situación se agrava, y las peticiones para la expansión de la pared ante el alcalde Galt vienen cada día.
La construcción y las patrullas
El Muro se eleva sobre las las calles, rivalizando con las torres de la muralla de la ciudad en altura. Varía de ancho, estrechándose en los puntos hasta tan sólo metro y medio y ampliar hasta un máximo de seis metros en los lugares donde los edificios abandonados forman parte de la barrera. Estas estructuras pueden parecer como agujeros en la barricada, pero los defensores las han llenado de escombros o con fuertes trampas mortales, que alertan a los guardias si los monstruos intentan abrirse paso.
Casetas de vigilancia a lo largo de la longitud pie del muro, reutilizando los restos de torreones señoriales y el antiguo cuartel de la Guardia de Neverwinter. Al menos diez soldados ocupan el puesto de día y de noche, y están equipados con cuernos de aviso para llamar a más refuerzos si una batalla lo requiere. Cuando cae la noche, las fuerzas Mintarn destapan antorchas siempreardientes en las esquinas de las casetas de vigilancia para proporcionar luz para las operaciones nocturnas.
El Muro fue originalmente un proyecto civil, pero ahora Neverember se ha hecho cargo de su gestión. El Muro fue originalmente un proyecto civil, pero ahora Neverember se ha hecho cargo de su gestión. Hoy en día, las patrullas son cerca de tres cuartas partes mercenarios Mintarn y una cuarta templados nativos de Neverwinter que se niegan a abandonar su autoimpuesta mayordomía. Los nativos que construyeron el Muro ven esta absorción con recelo, sobre todo ahora que tienen que recibir órdenes del duro líder de los mercenarios de Neverember, Sabine, o de su Capitán de El Muro, Durham Shaw. A muchas personas no les gusta Sabine por su personalidad, pero del capitán Shaw es recelado por muchas personas por una razón diferente, se le ha permitido permanecer en la ciudad y trabajar en el Muro a pesar de que sufre de los efectos de la Plaga de Conjuros. Algunos dicen que Shaw recibe este tratamiento especial porque es un amigo personal o pariente lejano de Lord Neverember.
El muro fue construido poco después del cataclismo, cuando los residentes de la ciudad que quedaban se dieron cuenta de que necesitaban una defensa contra los monstruos retorcidos que desbordaban el Abismo.
En sus primeros días, el Muro mantuvo a raya a los monstruos derivándolos hacia partes de la ciudad que ya habían sido destruidas. Cuando Neverember llegó, se convirtió en una prioridad reforzar lo que él veía como una fortificación defensiva eficaz con sus propios ingenieros y soldados. En un principio, el muro bloqueaba a sólo unas calles donde los ataques eran comunes, pero desde que empezó la reconstrucción, se ha expandido hasta extenderse desde el cementerio Neverdeath hasta la antigua Casa del Saber.
En combinación con el río Neverwinter, el Muro sigue brindando contención efectiva, aunque la gente ha visto monstruosidades cambiados por la plaga en la demarcación del norte y, más recientemente, cerca de los agujeros de drenaje de la ciudad. La situación se agrava, y las peticiones para la expansión de la pared ante el alcalde Galt vienen cada día.
La construcción y las patrullas
El Muro se eleva sobre las las calles, rivalizando con las torres de la muralla de la ciudad en altura. Varía de ancho, estrechándose en los puntos hasta tan sólo metro y medio y ampliar hasta un máximo de seis metros en los lugares donde los edificios abandonados forman parte de la barrera. Estas estructuras pueden parecer como agujeros en la barricada, pero los defensores las han llenado de escombros o con fuertes trampas mortales, que alertan a los guardias si los monstruos intentan abrirse paso.
Casetas de vigilancia a lo largo de la longitud pie del muro, reutilizando los restos de torreones señoriales y el antiguo cuartel de la Guardia de Neverwinter. Al menos diez soldados ocupan el puesto de día y de noche, y están equipados con cuernos de aviso para llamar a más refuerzos si una batalla lo requiere. Cuando cae la noche, las fuerzas Mintarn destapan antorchas siempreardientes en las esquinas de las casetas de vigilancia para proporcionar luz para las operaciones nocturnas.
El Muro fue originalmente un proyecto civil, pero ahora Neverember se ha hecho cargo de su gestión. El Muro fue originalmente un proyecto civil, pero ahora Neverember se ha hecho cargo de su gestión. Hoy en día, las patrullas son cerca de tres cuartas partes mercenarios Mintarn y una cuarta templados nativos de Neverwinter que se niegan a abandonar su autoimpuesta mayordomía. Los nativos que construyeron el Muro ven esta absorción con recelo, sobre todo ahora que tienen que recibir órdenes del duro líder de los mercenarios de Neverember, Sabine, o de su Capitán de El Muro, Durham Shaw. A muchas personas no les gusta Sabine por su personalidad, pero del capitán Shaw es recelado por muchas personas por una razón diferente, se le ha permitido permanecer en la ciudad y trabajar en el Muro a pesar de que sufre de los efectos de la Plaga de Conjuros. Algunos dicen que Shaw recibe este tratamiento especial porque es un amigo personal o pariente lejano de Lord Neverember.
La Casa del Saber
En el extremo noreste del Muro se encuentra lo que fue, en tiempos más felices, un floreciente templo a Oghma, dios del conocimiento y la sabiduría. Antes del terremoto, la Casa del Saber servía como depósito de aprendizaje narrado, incluyendo mapas, historia, y cientos de poemas y agrietados libros producidos a lo largo de los siglos. Hoy en día, se ve menos como una biblioteca y más como un campo de refugiados, que se mantiene en la zona donde el Muro se acerca al río Neverwinter.
Después del cataclismo, el liderazgo del reducido rebaño en la Casa del Saber cayó sobre hermano Anthus, un hombre mayor interesado en estudiar el Abismo y a las criaturas que tocadas por la Plaga de Conjuros que provenían del mismo. Su investigación condujo al uso del templo como un refugio para las víctimas de la Plaga de Conjuros, lo que no agradó al Lord Protector. Después de la muerte de Anthus en circunstancias misteriosas, una mujer joven en la residencia conocida como la Profeta relocalizó el hospital improvisado y a los clérigos restantes de Oghma a el Baluarte de Helm, alegando que un desastre profetizado caería sobre la ciudad, si no se hacía así.
Sólo un sacerdote se mantuvo después de la partida del Profeta: El Maestro del Saber Atlavastun, humano de mediana edad que se convirtió en el custodio de la biblioteca después del cataclismo. Temiendo lo peor por el cataclismo ocurrido, los maestros del saber del templo sellaron el santuario interior, dejando al joven Atlavast dentro del sello. A medida que la tierra se estremeció y tembló, la mente de Atlavast creció de manera inestable. Ahora convertido en un recluso excéntrico, Atlavast mantiene las bóvedas inferiores, catalogándolas y reorganizandolas continuamente. Él rara vez se vislumbra en estos días, y la principal evidencia de su existencia es el parpadeo de la luz que se filtra hacia arriba ocasionalmente desde las grietas de los adoquines en la oscuridad de la noche. Por regla general, nadie se atreve a investigar más de cerca.
Después de que la Profeta se fuera, el templo quedó muy dañado vacío y abandonado hasta hace poco, cuando un grupo de invasores se movió de nuevo a la casa. Estos refugiados procedentes del Distrito del Rio se ganan su sustento haciendo sonar las campanas del templo cuando observan una nueva ola de monstruos que desbordan el Abismo hacia el Muro. Lord Neverember dice que está muy contento con su ingenio, y los mercenarios Mintarn que custodian la Muro son conocidos por dejar pequeños regalos de comida y bebida para mostrar su agradecimiento. Pero aquellos que frecuentan su compañía deben tener cuidado, la mayoría, si no todos, de los invasores son cultistas de Asmodeus, usando su historia de refugiados como tapadera para corromper a los guardias de la ciudad. Recientemente, un agradecido capitán Mintarn llegó al campamento para compartir una comida, un invasor le sirvió la sopa, pero también lo puso bajo la posesión jurada de un demonio de Asmodeus.
Después del cataclismo, el liderazgo del reducido rebaño en la Casa del Saber cayó sobre hermano Anthus, un hombre mayor interesado en estudiar el Abismo y a las criaturas que tocadas por la Plaga de Conjuros que provenían del mismo. Su investigación condujo al uso del templo como un refugio para las víctimas de la Plaga de Conjuros, lo que no agradó al Lord Protector. Después de la muerte de Anthus en circunstancias misteriosas, una mujer joven en la residencia conocida como la Profeta relocalizó el hospital improvisado y a los clérigos restantes de Oghma a el Baluarte de Helm, alegando que un desastre profetizado caería sobre la ciudad, si no se hacía así.
Sólo un sacerdote se mantuvo después de la partida del Profeta: El Maestro del Saber Atlavastun, humano de mediana edad que se convirtió en el custodio de la biblioteca después del cataclismo. Temiendo lo peor por el cataclismo ocurrido, los maestros del saber del templo sellaron el santuario interior, dejando al joven Atlavast dentro del sello. A medida que la tierra se estremeció y tembló, la mente de Atlavast creció de manera inestable. Ahora convertido en un recluso excéntrico, Atlavast mantiene las bóvedas inferiores, catalogándolas y reorganizandolas continuamente. Él rara vez se vislumbra en estos días, y la principal evidencia de su existencia es el parpadeo de la luz que se filtra hacia arriba ocasionalmente desde las grietas de los adoquines en la oscuridad de la noche. Por regla general, nadie se atreve a investigar más de cerca.
Después de que la Profeta se fuera, el templo quedó muy dañado vacío y abandonado hasta hace poco, cuando un grupo de invasores se movió de nuevo a la casa. Estos refugiados procedentes del Distrito del Rio se ganan su sustento haciendo sonar las campanas del templo cuando observan una nueva ola de monstruos que desbordan el Abismo hacia el Muro. Lord Neverember dice que está muy contento con su ingenio, y los mercenarios Mintarn que custodian la Muro son conocidos por dejar pequeños regalos de comida y bebida para mostrar su agradecimiento. Pero aquellos que frecuentan su compañía deben tener cuidado, la mayoría, si no todos, de los invasores son cultistas de Asmodeus, usando su historia de refugiados como tapadera para corromper a los guardias de la ciudad. Recientemente, un agradecido capitán Mintarn llegó al campamento para compartir una comida, un invasor le sirvió la sopa, pero también lo puso bajo la posesión jurada de un demonio de Asmodeus.
Neverdeath
Una pared de piedra agrietada, remendada en lugares con madera gruesa, rodea el cementerio llamado Neverdeath. Consta de dos amplias zonas, más o menos cuadradas de la ciudad, Neverdeath está llena de hileras de lápidas intercaladas con mausoleos y estatuas desmoronadas, a menudo cubiertas de hierbas marchitas. El tiempo, la Plaga de Conjuros, y el cataclismo tomaron su peaje en el cementerio, elevando algunas secciones por encima de otras, colapsando edificios, y revelando tumbas. Los ataúdes ahora sobresalen desde pequeños acantilados, y dejan caer restos de huesos por el terreno.
El cementerio debe su nombre a una bendición común dedicada a los muertos. Mientras la ciudad permaneciera en verano se decía que los muertos nunca se irían realmente. Muchos piensan que el invierno vendría pronto a por los muertos de la ciudad, sin embargo, fue traída por las malignas fuerzas de Thay. Los mercenarios de Neverember temen al cementerio, y prefieren quemar a los muertos fuera de los muros del cementerio. Si no se queman, los cadáveres que se dejan cerca a veces se levantan por su propia voluntad.
Los visitantes que violan las paredes de Neverdeath han sido objeto de ataques de los muertos vivientes que emergen de la tierra. La señora cruel del cementerio, la hechicera Thayana Valindra Shadowmantle, espera que estas primeras líneas de defensa fallen y se basa en ellas sólo para advertirle a los intrusos. Para Valindra, los mausoleos abundantes e interconectados del cementerio son una guarida compleja y útil tácticamente, que los lugareños ya temen. Mejor aún, puede tomar su selección de los cadáveres y huesos amarillentos enmohecidos enterrados aquí y perturbados por el cataclismo.
Valindra utiliza el cementerio para reforzar sus fuerzas de no-muertos y viajar a Evernight por medio de un cruce de sombra, un lugar donde la frontera delgada entre el mundo mortal y el Páramo Sombrío es fácilmente roto en el centro de Neverdeath.
La Criptas de Waterclock
Debajo de un gran mausoleo, sin pretensiones se encuentran las catacumbas de la Cofradía Waterclock, una organización de artesanos famosa por la construcción de hermosos e intrincados relojes.
Más de cien años antes de la Plaga de Conjuros un mago elfo en la Torre de Huéspedes del Arcano de Luskan descubrió zarcillos de magia debajo de la torre, de forma similar al sistema de raíces de un árbol. Estos zarcillos corrían hacia el mar en una dirección y a la tierra hacia el sur en otra. Parecía que tirara de una fuerza elemental del mar y la canalizan a través de las raíces en el sur. Obsesionado con los artificios, conjuros, magia y abjuraciones, el elfo trató de estudiar los zarcillos. Preguntas sutiles le llevaron a creer que ninguno de sus compañeros magos sabía nada acerca de su descubrimiento, así que se fue a ver dónde el misterio lo llevara.
Los viajes del elfo lo llevaron a Neverwinter, donde construyó una nueva vida bajo el nombre Lucan Greenharrow. Conoció a un constructor de relojes de agua notables llamado Saborn Rende!, y juntos fundaron la Cofradía Waterclock, en secreto usando la magia de Lucan para elaborar relojes increíblemente precisos y hermosos. A medida que pasaban los años, Lucan estudió la tradición que había robado de la Hosttower, y lo que aprendió alimentó su deseo de profundizar en la tierra.
La construcción de las catacumbas utiliza las técnicas más avanzadas del gremio, entre ellas algunos de los rituales secretos vinculado a los elementales de agua. La mazmorra es un extenso complejo de engranajes, cascadas, y trampas, impulsadas por los elementales de agua unidas al mantenimiento de las máquinas de allí. El agua de mar se desplaza a través de las venas traslúcidas en las paredes y se derrama a través de roca sólida hacia Luskan en el norte y Gauntlgrym en algún lugar al este. Laboratorios secretos de Lucan y cámaras de convocación permanecen,se mantiene los documentos antiguos sobre el ritual originalmente utilizado para enlazar el primordial de Gauntlgrym, así como instrucciones para la reparación de elementos rotos de la prisión del primordial.
El cementerio debe su nombre a una bendición común dedicada a los muertos. Mientras la ciudad permaneciera en verano se decía que los muertos nunca se irían realmente. Muchos piensan que el invierno vendría pronto a por los muertos de la ciudad, sin embargo, fue traída por las malignas fuerzas de Thay. Los mercenarios de Neverember temen al cementerio, y prefieren quemar a los muertos fuera de los muros del cementerio. Si no se queman, los cadáveres que se dejan cerca a veces se levantan por su propia voluntad.
Los visitantes que violan las paredes de Neverdeath han sido objeto de ataques de los muertos vivientes que emergen de la tierra. La señora cruel del cementerio, la hechicera Thayana Valindra Shadowmantle, espera que estas primeras líneas de defensa fallen y se basa en ellas sólo para advertirle a los intrusos. Para Valindra, los mausoleos abundantes e interconectados del cementerio son una guarida compleja y útil tácticamente, que los lugareños ya temen. Mejor aún, puede tomar su selección de los cadáveres y huesos amarillentos enmohecidos enterrados aquí y perturbados por el cataclismo.
Valindra utiliza el cementerio para reforzar sus fuerzas de no-muertos y viajar a Evernight por medio de un cruce de sombra, un lugar donde la frontera delgada entre el mundo mortal y el Páramo Sombrío es fácilmente roto en el centro de Neverdeath.
La Criptas de Waterclock
Debajo de un gran mausoleo, sin pretensiones se encuentran las catacumbas de la Cofradía Waterclock, una organización de artesanos famosa por la construcción de hermosos e intrincados relojes.
Más de cien años antes de la Plaga de Conjuros un mago elfo en la Torre de Huéspedes del Arcano de Luskan descubrió zarcillos de magia debajo de la torre, de forma similar al sistema de raíces de un árbol. Estos zarcillos corrían hacia el mar en una dirección y a la tierra hacia el sur en otra. Parecía que tirara de una fuerza elemental del mar y la canalizan a través de las raíces en el sur. Obsesionado con los artificios, conjuros, magia y abjuraciones, el elfo trató de estudiar los zarcillos. Preguntas sutiles le llevaron a creer que ninguno de sus compañeros magos sabía nada acerca de su descubrimiento, así que se fue a ver dónde el misterio lo llevara.
Los viajes del elfo lo llevaron a Neverwinter, donde construyó una nueva vida bajo el nombre Lucan Greenharrow. Conoció a un constructor de relojes de agua notables llamado Saborn Rende!, y juntos fundaron la Cofradía Waterclock, en secreto usando la magia de Lucan para elaborar relojes increíblemente precisos y hermosos. A medida que pasaban los años, Lucan estudió la tradición que había robado de la Hosttower, y lo que aprendió alimentó su deseo de profundizar en la tierra.
La construcción de las catacumbas utiliza las técnicas más avanzadas del gremio, entre ellas algunos de los rituales secretos vinculado a los elementales de agua. La mazmorra es un extenso complejo de engranajes, cascadas, y trampas, impulsadas por los elementales de agua unidas al mantenimiento de las máquinas de allí. El agua de mar se desplaza a través de las venas traslúcidas en las paredes y se derrama a través de roca sólida hacia Luskan en el norte y Gauntlgrym en algún lugar al este. Laboratorios secretos de Lucan y cámaras de convocación permanecen,se mantiene los documentos antiguos sobre el ritual originalmente utilizado para enlazar el primordial de Gauntlgrym, así como instrucciones para la reparación de elementos rotos de la prisión del primordial.
Muelles de Neverwinter
Gran parte de la riqueza original de Nunca invierno y la influencia vino de su posición como uno de los pocos puertos profundos en la Costa de la Espada. Los muelles de Neverwinter estaban en el corazón comercial de la ciudad, aunque en algunos aspectos ese corazón estaba infectado con la oscuridad y la corrupción.
La Plaga de Conjuros en cierta manera purgó esa corrupción, trozos de tierra se separaron y elevaron en el cielo, formando motas de tierra que sobrevolaban la zona. Los residentes sobrevivientes de la ciudad adaptándose, conectaron las motas flotantes a la orilla con cuerdas, cadenas y puentes. Sin embargo, el cataclismo más tarde destruyó los cimientos de estos puentes, y las corrientes cambiaron inundado zonas enteras del puerto con olas de marea. El comercio ya en disminución de Neverwinter se secó por completo, dejando los muelles de una ciudad fantasma en descomposición. Sólo unos pocos pescadores y el ocasional barco pirata hicieron puerto aquí.
Lord Neverember hizo de la reconstrucción de este centro de comercio una prioridad. Como parte de sus primeras iniciativas, envió ingenieros y leñadores a Upland Rise, una colina boscosa fuera de la ciudad que una vez sirvió como un parque para los residentes de la ciudad. Los equipos despojarón a la colina de toda la madera recuperable, dejando en Upland Rise un escaso eco de su antigua belleza, y la utilizaron para reconstruir los muelles.
A pesar de sus defectos como líder político, Neverember es un príncipe mercader brillante, y sus esfuerzos han restaurado el comercio de la ciudad. Hoy en día, los suministros y la moneda fluyen en Neverwinter a través de los muelles, a lo largo con los refugiados repatriados.
Tarmalune Cámara de Comercio
Los muelles reconstruidos han atraído a visitantes de todo la mar, miembros de un cárter del comercio de la ciudad de Tarmalune en Abeir Retornado. Ellos han llegado a Neverwinter a organizar rutas el comercio permanentes entre los dos continentes, y para superar a sus rivales de la ciudad de Abeiran Lylorn, que han aterrizado en Luskan con un objetivo similar.
Los Abeirianos se han instalado en el complejo de un gran almacén junto a una serie de muelles que están siendo reconstruidos. La Cámara de Comercio Tarmalune es una zona muy concurrida, donde los contactos se reúnen, se hacen los negocios, y los aventureros encontrarán sus servicios muy demandados.
La Plaga de Conjuros en cierta manera purgó esa corrupción, trozos de tierra se separaron y elevaron en el cielo, formando motas de tierra que sobrevolaban la zona. Los residentes sobrevivientes de la ciudad adaptándose, conectaron las motas flotantes a la orilla con cuerdas, cadenas y puentes. Sin embargo, el cataclismo más tarde destruyó los cimientos de estos puentes, y las corrientes cambiaron inundado zonas enteras del puerto con olas de marea. El comercio ya en disminución de Neverwinter se secó por completo, dejando los muelles de una ciudad fantasma en descomposición. Sólo unos pocos pescadores y el ocasional barco pirata hicieron puerto aquí.
Lord Neverember hizo de la reconstrucción de este centro de comercio una prioridad. Como parte de sus primeras iniciativas, envió ingenieros y leñadores a Upland Rise, una colina boscosa fuera de la ciudad que una vez sirvió como un parque para los residentes de la ciudad. Los equipos despojarón a la colina de toda la madera recuperable, dejando en Upland Rise un escaso eco de su antigua belleza, y la utilizaron para reconstruir los muelles.
A pesar de sus defectos como líder político, Neverember es un príncipe mercader brillante, y sus esfuerzos han restaurado el comercio de la ciudad. Hoy en día, los suministros y la moneda fluyen en Neverwinter a través de los muelles, a lo largo con los refugiados repatriados.
Tarmalune Cámara de Comercio
Los muelles reconstruidos han atraído a visitantes de todo la mar, miembros de un cárter del comercio de la ciudad de Tarmalune en Abeir Retornado. Ellos han llegado a Neverwinter a organizar rutas el comercio permanentes entre los dos continentes, y para superar a sus rivales de la ciudad de Abeiran Lylorn, que han aterrizado en Luskan con un objetivo similar.
Los Abeirianos se han instalado en el complejo de un gran almacén junto a una serie de muelles que están siendo reconstruidos. La Cámara de Comercio Tarmalune es una zona muy concurrida, donde los contactos se reúnen, se hacen los negocios, y los aventureros encontrarán sus servicios muy demandados.
Las Islas Flotantes
Otras dos motas de tierra flotan cerca de la costa de Neverwinter flanqueando a la Moonstone. Una de ellas es lugar de mucha actividad y la otra todo lo contrario.
La Boya del Pescador
Esta isla se cierne sobre el Mar de las Espadas más allá del extremo sur de la bahía. Salpicada de un puñado de chozas, que es el hogar y lugar de trabajo de los pescadores que han vivido en esta mota de tierra desde la Plaga de Conjuros. Hábiles en su oficio y sin miedo del clima y del mar turbulento, proporcionan una gran cantidad de alimentos a la ciudad.
Durante muchos años, se han extendido los rumores de que los pescadores han prosperado debido a su adoración a los dioses oscuros o alianzas antinaturales con las criaturas que viven bajo las olas. Independientemente de la veracidad de estas historias de taberna, el pueblo de Neverwinter come felizmente los peces y crustáceos traídos a tierra cada mañana y la tarde.
Durante muchos años, se han extendido los rumores de que los pescadores han prosperado debido a su adoración a los dioses oscuros o alianzas antinaturales con las criaturas que viven bajo las olas. Independientemente de la veracidad de estas historias de taberna, el pueblo de Neverwinter come felizmente los peces y crustáceos traídos a tierra cada mañana y la tarde.
El Skyhold de los Piratas
Las leyendas de Neverwinter dicen que esta mota de tierra que flota a gran altura sirvió como puerto inexpugnable para los piratas del cielo en los años posteriores a la Plaga de Conjuros. Debido a que la mota flota a un centenar de metros de altura y no es accesible por vía directa desde tierra, los piratas supuestamente almacenaban toda clase de tesoros allí, como un almacén seguro para los residentes ricos o influyentes de la ciudad.
Entonces, la historia da un giro oscuro. Todos los piratas murieron en una noche de sangre y traición, dejando el tesoro y su Skyship sobre la mota, junto con todo lo que los mató. Algunas personas creen que un dragón se ha cobrado el botín de los piratas como su tesoro, tomando la mota de tierra como su guarida porque la ciudad debajo de ella carece de medios para intervenir.
Independientemente de la verdad de la historia, una cosa es cierta El Skyhold de los Piratas lleva abandonado mucho tiempo. Desde los lugares adecuados en Neverwinter, uno puede ver los edificios de madera podrida que sobresalen de los bosques de la mota, pero lo que todavía existe allí ha visto poca intrusión en las últimas décadas.
Entonces, la historia da un giro oscuro. Todos los piratas murieron en una noche de sangre y traición, dejando el tesoro y su Skyship sobre la mota, junto con todo lo que los mató. Algunas personas creen que un dragón se ha cobrado el botín de los piratas como su tesoro, tomando la mota de tierra como su guarida porque la ciudad debajo de ella carece de medios para intervenir.
Independientemente de la verdad de la historia, una cosa es cierta El Skyhold de los Piratas lleva abandonado mucho tiempo. Desde los lugares adecuados en Neverwinter, uno puede ver los edificios de madera podrida que sobresalen de los bosques de la mota, pero lo que todavía existe allí ha visto poca intrusión en las últimas décadas.
Continuará