Aquí va un link al mapa que hice para nuestras partidas en Akenar por si alguien quiere usarlo entero, un trozo o simplemente curiosear.
http://www.akenar.com/Akenar/Mapas/Reino-de-Akenar6000.jpg
Los iconos de las ciudades son reusados de viejos mapas de Warhammer y el simbolito del norte lo saqué del mapa de la Tierra Media que viene en la primera edición de El Señor de los Anillos que se publicó en España (no lo pongo porque no sepa dibujar eso, que me lleva un minuto, sino en plan nostalgia).
Para el que le interese, un poco de historia:
Nosotros llevamos jugando en Akenar desde 1994, antes jugábamos en Greyhawk y de hecho están conectados pues en las últimas partidas en Nyrond y la propia ciudad de Greyhawk apareció un mesías llamado Síllevan, hijo de un carpinterio, que dijo que el mundo estaba por destruirse. Decía que era hijo del dios Gah, dios de la Justicia, y que los que le siguiesen serían "los justos" y se salvarían de la destrucción total. Sólo unos pocos empezaron a seguirle y durante varios años empezó a construir un arca de madera donde -según él- escaparían de la destrucción. Todo eso lo jugamos, claro. Algunos PJs eran seguidores de Síllevan y otros no.
Tras siete años de construcción, tenían un Arca gigantesco. Llegaba el solsticio de invierno y según Síllevan el mundo se iba al garete. Había casi tres mil seguidores, que entraron en el Arca. Había comida para meses, pero no eterna. Cerraron las puertas y no se escuchó nada.
Pasaron los días.
Luego semanas.
Cuando llevaban casi 10 semanas allí, en las muchas estancias y bodegas del Arca, empezó a correr la duda sobre si Síllevan estaba loco y en realidad no pasaba nada fuera porque el Arca parecía no moverse ni había señales de destrucción ni un solo ruido. La duda se fué transformando en rebelión y una facción grande, liderada por varios magos, trató de salir del Arca pero Síllevan trató de detenerlos. Hubo una batalla y muchos murieron, entre ellos el mesías que fué arrojado por una ventana que había permanecido cerrada. Fué entonces, al matarlo, cuando se vió que el Arca volaba por la nada oscura donde no había ni estrellas ni viento.
Sabedores de que Síllevan no había mentido, muchos se arrepintieron y los que nunca le abandonaron volvieron a atacar y mataron a todos los que habían asesinado a su líder, salvo a uno (que se hizo invisible y se escondió).
Al día siguiente, tras tres meses en el Arca, se escuchó un estruendo y el artefacto aterrizó en unas tierras desconocidas. Al abrir las puertas vieron un lago y unas colinas y bosques. Era un mundo nuevo.
Con los restos del Arca hicieron unas murallas de madera. Eligieron al ayudante de Síllevan, un tal Darion, como Rey, y se fundó la ciudad de Akenar. A los descendientes de estas gentes se les llama "arcanos" pues provienen del Arca. Ellos pensaban que estaban solos en aquel mundo pero se equivocaban...
Hoy, tras cientos de partidas, han pasado 1082 años desde aquel entonces. Este mapa es cómo está el reino de extendido desde aquella.
http://www.akenar.com/Akenar/Mapas/Reino-de-Akenar6000.jpg
Los iconos de las ciudades son reusados de viejos mapas de Warhammer y el simbolito del norte lo saqué del mapa de la Tierra Media que viene en la primera edición de El Señor de los Anillos que se publicó en España (no lo pongo porque no sepa dibujar eso, que me lleva un minuto, sino en plan nostalgia).
Para el que le interese, un poco de historia:
Nosotros llevamos jugando en Akenar desde 1994, antes jugábamos en Greyhawk y de hecho están conectados pues en las últimas partidas en Nyrond y la propia ciudad de Greyhawk apareció un mesías llamado Síllevan, hijo de un carpinterio, que dijo que el mundo estaba por destruirse. Decía que era hijo del dios Gah, dios de la Justicia, y que los que le siguiesen serían "los justos" y se salvarían de la destrucción total. Sólo unos pocos empezaron a seguirle y durante varios años empezó a construir un arca de madera donde -según él- escaparían de la destrucción. Todo eso lo jugamos, claro. Algunos PJs eran seguidores de Síllevan y otros no.
Tras siete años de construcción, tenían un Arca gigantesco. Llegaba el solsticio de invierno y según Síllevan el mundo se iba al garete. Había casi tres mil seguidores, que entraron en el Arca. Había comida para meses, pero no eterna. Cerraron las puertas y no se escuchó nada.
Pasaron los días.
Luego semanas.
Cuando llevaban casi 10 semanas allí, en las muchas estancias y bodegas del Arca, empezó a correr la duda sobre si Síllevan estaba loco y en realidad no pasaba nada fuera porque el Arca parecía no moverse ni había señales de destrucción ni un solo ruido. La duda se fué transformando en rebelión y una facción grande, liderada por varios magos, trató de salir del Arca pero Síllevan trató de detenerlos. Hubo una batalla y muchos murieron, entre ellos el mesías que fué arrojado por una ventana que había permanecido cerrada. Fué entonces, al matarlo, cuando se vió que el Arca volaba por la nada oscura donde no había ni estrellas ni viento.
Sabedores de que Síllevan no había mentido, muchos se arrepintieron y los que nunca le abandonaron volvieron a atacar y mataron a todos los que habían asesinado a su líder, salvo a uno (que se hizo invisible y se escondió).
Al día siguiente, tras tres meses en el Arca, se escuchó un estruendo y el artefacto aterrizó en unas tierras desconocidas. Al abrir las puertas vieron un lago y unas colinas y bosques. Era un mundo nuevo.
Con los restos del Arca hicieron unas murallas de madera. Eligieron al ayudante de Síllevan, un tal Darion, como Rey, y se fundó la ciudad de Akenar. A los descendientes de estas gentes se les llama "arcanos" pues provienen del Arca. Ellos pensaban que estaban solos en aquel mundo pero se equivocaban...
Hoy, tras cientos de partidas, han pasado 1082 años desde aquel entonces. Este mapa es cómo está el reino de extendido desde aquella.