King_Daeron
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En la campaña que jugué de Dragonlance, el master nos saco 3 dragones: Uno rojo, otro blanco y el último fue uno azul.
Mientras íbamos caminando, nos encontramos con un pueblo quemado hasta los cimientos, descubrimos que lo había echo un dragón rojo joven de tamaño grande ,como yo llevaba una clériga de Misakal y pedí al grupo su ayuda para enterrar a los muertos para que reposaran de forma digna, cuando estábamos a mitad de la faena, apareció un guerrero chamuscado y lloroso que nos dijo que era el único superviviente del poblado y después de consolarle, le pedimos que nos ayudara a acabar de enterrar a los suyos y que nos acompañara hasta la próxima ciudad.
Caminando, llegamos a hasta que unos silvanestis nos dieron el alto, después de un intercambio de impresiones y de comprobar que éramos buena gente, nos dejaron quedarnos a pasar la noche, por la mañana, mi cleriga vio que el guerrero al que encontramos estaba en una postura muy rara (como si llorara de nuevo) así que me acerque a consolarle y el muy cabron me apuñalo en el costillar, claro al tener el pulmón perforado no podía gritar, afortunadamente mis compañeros se dieron cuenta de que el guerrero me estaba haciendo algo malo y me soltó (momento que aproveche para curarme) y vimos como se iba transformando en dragón, antes de que se transformara del todo, bajamos de los árboles hasta el suelo y vimos como destrozaba la tienda y se elevaba para hacer un ataque en picado con su aliento de fuego, cuando creíamos que ya íbamos a usar nuevas hojas de pjs, estallo en una bola inmensa de fuego (que afortunadamente solo afecto a las copas de los árboles), cortesía de la espada planaria absorbe-almas de uno de los pjs , claro que eso el resto de nosotros no lo sabíamos.
En otro momento pondré los otros encuentros.
Mientras íbamos caminando, nos encontramos con un pueblo quemado hasta los cimientos, descubrimos que lo había echo un dragón rojo joven de tamaño grande ,como yo llevaba una clériga de Misakal y pedí al grupo su ayuda para enterrar a los muertos para que reposaran de forma digna, cuando estábamos a mitad de la faena, apareció un guerrero chamuscado y lloroso que nos dijo que era el único superviviente del poblado y después de consolarle, le pedimos que nos ayudara a acabar de enterrar a los suyos y que nos acompañara hasta la próxima ciudad.
Caminando, llegamos a hasta que unos silvanestis nos dieron el alto, después de un intercambio de impresiones y de comprobar que éramos buena gente, nos dejaron quedarnos a pasar la noche, por la mañana, mi cleriga vio que el guerrero al que encontramos estaba en una postura muy rara (como si llorara de nuevo) así que me acerque a consolarle y el muy cabron me apuñalo en el costillar, claro al tener el pulmón perforado no podía gritar, afortunadamente mis compañeros se dieron cuenta de que el guerrero me estaba haciendo algo malo y me soltó (momento que aproveche para curarme) y vimos como se iba transformando en dragón, antes de que se transformara del todo, bajamos de los árboles hasta el suelo y vimos como destrozaba la tienda y se elevaba para hacer un ataque en picado con su aliento de fuego, cuando creíamos que ya íbamos a usar nuevas hojas de pjs, estallo en una bola inmensa de fuego (que afortunadamente solo afecto a las copas de los árboles), cortesía de la espada planaria absorbe-almas de uno de los pjs , claro que eso el resto de nosotros no lo sabíamos.
En otro momento pondré los otros encuentros.